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Práctica

M3, el primer descubrimiento del propio Messier

El cúmulo estelar globular en la constelación de los Perros de Caza fue el primer descubrimiento de Charles Messier. ¿Se pueden distinguir en él estrellas individuales?

Cúmulo estelar globular M3 en la constelación de los Perros de Caza. Bernhard Hubl / CCD Guide Cúmulo estelar globular M3 en la constelación de los Perros de Caza. Bernhard Hubl / CCD Guide

M3, el cúmulo estelar globular en la constelación de los Perros de Caza, fue el primer descubrimiento que hizo el propio Charles Messier. El 3 de mayo de 1764 descubrió: "una nebulosa entre Boyero y uno de los Perros de Caza de Hevelius; no contiene ninguna estrella, su centro es luminoso y su brillo se apaga imperceptiblemente; es redonda; con buena visibilidad, se puede ver con telescopio de 1 pie".

La descripción de Messier coincide con la imagen que los astrónomos captan de M3 desde núcleos urbanos. Actualmente basta un telescopio de poca distancia focal y apertura pequeña (a partir de 60 mm) para ver la mancha difusa de este cúmulo globular de 6,2 de magnitud y 18' de tamaño. Es obvio que Messier no consiguió tanta resolución como para ver estrellas individuales. Y justo ahí, en la resolución de M3 en un disco nebuloso granulado, es donde los astrónomos de ciudad empiezan a tener dificultades.

Exactamente en el triángulo

Imagen de M3. Hans-Jürgen Merk Imagen de M3. Hans-Jürgen Merk

Lo primero es encontrar M3. En mi propia experiencia, con un instrumento con GoTo siempre se consigue de manera precisa y sin necesidad de correcciones ni ajustes posteriores. Pero quien prefiera hacer la búsqueda manualmente, debe partir de la brillante estrella Arturo (α Boo), girar 6° al oeste hasta llegar a un prominente trío de estrellas formado por η, τ y 7 Boo y, después, explorar la región del cielo hacia el norte en busca de un disco nebuloso.

Para ello resulta ventajoso el hecho de que M3 esté exactamente dentro de un triángulo formado por estrellas tenues, que ayudan bastante a la hora de ajustar el enfoque. Cuando logre que las estrellas del entorno se vean puntiformes, M3 se empezará a ver automáticamente como un disco nebuloso plano.

Una cuestión de resolución

Sin embargo, en los telescopios de poca apertura M3 se sigue viendo tan difuminado como Messier lo escribió hace más de 250 años. La pregunta más peliaguda relativa a la observación de cúmulos globulares desde entornos urbanos es si es posible "granular" la nebulosa, es decir, definirla hasta ver estrellas individuales. La experiencia ha demostrado que M3 requiere el uso de al menos un telescopio reflector de 8" y un factor de aumento de 160 o más. Y si además la noche es oscura, es posible alcanzar cierta resolución (aunque sea mediante la técnica de la observación indirecta, que consiste en mirar un poco más allá del disco de la nebulosa para ver las estrellas individuales dentro del mismo como destellos de luz).

Mapa estelar de M3 en la constelación de los Perros de Caza. J. Scholte Mapa estelar de M3 en la constelación de los Perros de Caza. J. Scholte

Autor: Karl-Peter Julius / Licencia: Oculum-Verlag GmbH