BioMon: el placer de la biología en la escuela o el trabajo
Si necesita ver organismos y estructuras celulares en todas sus facetas con gran nitidez e incluso compartirlos con sus alumnos, entonces el microscopio BioMon es la solución ideal, con una óptica de calidad y una mecánica de precisión. Presenta cruceta y platina portaobjetos grandes y permite obtener fotos nítidas con factores de aumento de hasta 1000x. Así no solo podrá ver el mundo de lo diminuto, sino sumergirse en él.
Resumen de las ventajas:
- Microscopio de alta calidad para uso académico en clases de biología, profesional y privado
- Gran cruceta coaxial con mucho espacio y rueda giratoria para unos movimientos de precisión en todas las direcciones para analizar los preparados con suma facilidad
- Condensador Abbe para una iluminación uniforme del preparado y un contraste ultra fuerte para identificar y analizar los detalles más pequeños
- Ocular con tubo giratorio a 360º suave como la seda para que dos personas puedan observar al mismo tiempo sin necesidad de cambiarse de sitio
- Iluminación LED de intensidad regulable
La biología ahora más fácil
Este microscopio le permitirá adentrarse en el mundo de la microscopia como si fuese profesional. Y es que ofrece muchas prestaciones típicas de los caros aparatos profesionales. Podrá ver las paredes celulares y los canales del jugo de un tallo de ruibarbo o glóbulos rojos. Y todo con una nitidez y una riqueza de detalles tan pasmosas que querrá volver a mirar a través del ocular.
Ocular con tubo giratorio a 360º
Con este microscopio se puede disfrutar de sesiones de observación solo o en pareja. Todo el tubo es completamente giratorio, así que podrá observar cómodamente sin necesidad de andar intercambiándose el sitio para mirar por el ocular.
Cruceta con ajuste de precisión
En los microscopios baratos tiene que centrar el preparado manualmente en la platina portaobjetos. Con el BioMon no tendrá que preocuparse por esto. Solo tendrá que colocar el portaobjetos entre los resortes de agarre de la generosa platina. Así el preparado quedará centrado automáticamente.
El accionamiento coaxial de precisión permite examinar los preparados a grandes aumentos. Imagínese que flotase sobre una superficie gigante y pudiese moverse en cualquier dirección sin esfuerzo. Esa es la sensación que se tiene al mirar una muestra con el accionamiento de precisión. Ligereza y fascinación. Es genial, porque con solo una mano puede navegar en todas las direcciones sin necesidad de desviar la mirada.
Condensador Abbe con la tecnología de los profesionales
La verdad es que los microscopios profesionales no son nada sin un condensador Abbe. Pues bien, esta tecnología también está integrada en el BioMon. Este componente óptico, que está ubicado bajo la cruceta, garantiza una iluminación homogénea del objeto. Pero eso no es todo: una plataforma elevable permite cambiar la posición del condensador, abriendo así la puerta a unos niveles de contraste que nunca había visto antes. Además, un soporte adicional para filtros puede aumentar el contraste aún más. Explorar los detalles de las muestras con el condensador y la iluminación es un verdadero juego. Un mecanismo de diafragma procura cambios en el contraste.
Luz LED para una iluminación brillante
Este microscopio está equipado con LED de brillo ajustable para una correcta presentación, porque los objetos se ven mucho mejor a la luz. Podrá ajustar la luminosidad que necesite de manera exacta con una rueda.
Factor de aumento de hasta 1000x con inmersión en aceite
40x, 100x, 400x o incluso 1000x: al seleccionar el factor de aumento que desea, el revólver de objetivos se enclava en la posición correspondiente. El enfoque se ajusta mediante un accionamiento de aproximación con un reductor de alta precisión. Es práctico y cómodo: tras cambiar el objetivo casi no tendrá que reenfocar. La imagen se ve nítida y clara incluso con un factor de aumento de 1000x. El objetivo para inmersión en aceite dirige los rayos de luz en las trayectorias correctas para que pueda ver detalles con una gran profundidad.
La primera vez que se observa con un microscopio BioMon es como la primera vez que se monta en un coche eléctrico: ¡toda una sorpresa!